La llama triple es de suma importancia ya que contiene nuestra esencia divina. Está conformada por 3 de las 7 llamas de poder y se aloja en el chakra del corazón. Esta llama triple es lo que también conocemos como santísima trinidad y de igual manera la conforman PADRE, HIJO y MADRE (así es, el concepto original es la madre y no el Espíritu Santo ya que la iglesia católica se encargó de borrar el aspecto femenino de Dios). La llama triple está constituída por:
VOLUNTAD - Llama/Rayo Azul Cristal, que representa al Padre.
SABIDURÍA - Llama/Rayo Amarillo Dorado, que representa al Hijo.
AMOR-Llama/Rayo Rosa, que representa a la Madre.
Estas 3 llamas se encuentran brotando del corazón energético o 4º chakra (Anahata) y cuando no está activo se encuentra encapsulado en Llama Blanca donde aguarda su resurección. Debido a su gran poder una vez despierta esta llama triple, se le conoce también como "Cristo interno".
En nuestro camino y encuentro espiritual vamos despertando a este Cristo para su "Resurreción", aquí es muy importante señalar que la palabra Cristo, proviene del griego y originalmente quiere decir “lleno de gracia”, “ungido” así que dejemos a un lado la idea de creer que cuando se menciona "Cristo" se hace referencia únicamente al Maestro Jesús. La segunda venida de Cristo se refiere precisamente a este despertar individual de la consciencia Crística (cristalina, pura), lo que hizo el Maestro Jesús en su tiempo fue servir como ejemplo y demostrar todo aquello que nosotros somos capaces de hacer y mucho más si conectamos con esta consciencia Crística.
En la medida en la que estemos conscientes de esta presencia Crística de la triple llama en nosotros, seremos capaces de acceder a nuestro tesoro de Voluntad, Sabiduría y Amor para usarlo en perfección y luz.
¡La práctica hace al maestro!
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